Un eco-sistema en crecimiento
Casi todos los días nos enteramos sobre el lanzamiento de nuevas empresas que surgen dentro del eco-sistema financiero con una fuerte impronta de base tecnológica, bajo el concepto de promover la inclusión financiera. Palabras como Fintech (Financial + Technology), Insurtech (Insurance + Technology); Crowdfunding (recaudación de fondos para mecenazgo), Bitcoins, Billeteras Digitales, Proveedores de Servicio de Pago, startups financieras, entre otras, han ingresado al vocabulario cotidiano de la sección Negocios de los medios de comunicación.
Otro concepto que cobró relevancia relacionado al mismo fenómeno son las llamadas empresas “Unicornio”. Aileen Lee, fundadora de Cowboy Venture, fue la primera en introducir éste término mitológico, refiriéndose a aquellas compañías que alcanzan un valor de mil milllones de dólares en alguna etapa de levantamiento de capital inversor.
El diseño de un Plan de Negocios
Todos aquellos que alguna vez participaron en algún proceso de lanzamiento de un producto, una unidad de negocios o de una empresa, se enfrentaron alguna vez a la necesidad de Diseñar un Plan de Negocios, incluidas aquellas empresas a las cuáles nos referimos en la introducción y que sueñan con convertirse en Unicornios.
A la hora de diseñar el Plan de Negocios, además de los aspectos tradicionales como Marca, Competencia, Flujo de Fondos, Presupuestos, Estrategias Genéricas, Investigación de Mercados, Segmentación de Clientes, Análisis FODA (Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas) y varios etcéteras más, adquiere especial relevancia en la viabilidad futura, el análisis minucioso del ambiente regulatorio y los Riesgos asociados.
Una empresa cuya misión tiene aspectos vinculados con el sistema financiero, sabe por definición que directa o indirectamente tendrá que afrontar un análisis minucioso de la normativa vigente en términos de sus obligaciones regulatorias. El espectro es amplio: desde normativa de los Bancos Centrales, hasta normativa de cada país inspirada en los estándares internacionales del GAFI para Prevenir el Lavado de Activos y mitigar el riesgo de financiamiento del Terrorismo.
En ese sentido es importante prever un abordaje sistémico a la hora de mitigar riesgos contando con aplicaciones/software y previendo un presupuesto para ello. La velocidad y el volúmen de los negocios financieros, exigen contar con tecnología que mitigue los riesgos y permita cumplir con cada una de las regulaciones. Especialmente en lo referente a Prevención de Lavado y Prevención de Financiamiento del Terrorismo, el Sujeto Obligado (empresa) posee una carga pública que los obliga a contar con un Manual de Procedimientos de Prevención de Lavado y una sistematización de los controles y de una Debida Diligencia dependiendo del nivel de riesgo de sus operaciones.
Nuevas prácticas para el éxito
En los últimos tiempos surgieron empresas, startups financieras, que tangencialmente están en el micro-sistema financiero, pero aun no son alcanzadas por las regulaciones formales (cajas de seguridad privada extra-bancarias, cajeros automáticos privados -ATM-fuera del circuito bancario, empresas de Bitcoins, etc.). Sin embargo, para mitigar riesgos reputacionales que podrían dañar la imagen de la empresa seriamente, adoptan las mejores prácticas del mercado en materia de mitigación de riesgos y deciden contar con aplicaciones para Prevenir el Lavado de Activos y el financiamiento de actividades ilícitas.
En definitiva, a la hora de planificar el lanzamiento de una empresa se debe evaluar el ambiente regulatorio, los riesgos asociados y las distintas herramientas tecnológicas que permiten sistematizar, y mitigar los riegos en forma eficiente.